El Chile de hoy
No quisiera adjudicarme el diagnostico ni mucho menos la solución de la crisis que vive Chile hoy. Sin embargo, quiero dejar algunas reflexiones que me dan vuelta por mi cabeza.
Cuando era niño, recuerdo que en mi casa no se hablaba de la actualidad del país, o quizás a mi no me importaban esos temas y por eso no lo recuerdo, las onces tipicamente eran viendo la novela de moda, tipo sucupira, amores de mercado, etc... y no recuerdo ver las noticias, seguramente mis amados padres pensaban que eran temas que a los niños de los años 80 no les deberían interesar, sobretodo por lo convulsionado del país de aquella época.
Hoy, viendo al Chile actual, agradezco no haber sufrido esa angustia de ver como pasan estas cosas en las calles de mi querido país, y me siento extraño por no estar ahí, marchando, gritando, alegando por los derechos de las personas y parar los abusos. Tengo en casa un bebe que me detiene con la mirada, tengo que ser responsable de ir al trabajo al otro día, de evitar meterme en problemas y limitarme a apoyar desde mi casa y mis pensamientos... con un par de comentarios por redes sociales increpando a políticos y personas que yo considero responsable de lo que pasa.
Los abusos se han incrementados últimamente y todos lo hemos notado, basta con ver cosas como los planes de salud, los combustibles, los servicios como agua, luz, Internet, los pasajes de micro, la bolsa de supermercado, la carne, el pollo, el confort, medicamentos, etc, etc... Los que no nacimos en cuna de oro las tenemos que rasgar y gracias a la ayuda de los padres y con los créditos universitarios (que te dejan endeudado por alrededor de 20 años) logramos avanzar hacia una tranquilidad ficticia, que se traduce en necesidades básicas relativamente cubiertas y algunas comodidades como 1 auto, celular y poder ir a un restaurante de vez en cuando.
Objetivamente pertenezco, junto a mi familia, a un grupo de personas minoritario, la gran mayoría de los chilenos tienen ingresos inferiores a $500.000, pero los que estamos en esta situación también coincidimos que no somos estables, tenemos nuestros cimientos afirmados en palos de fósforos, si un miembro de la familia se enferma el gasto que hay que hacer es tan grande que no se puede soportar sin recurrir a gastar el patrimonio que hemos capitalizado y eso es un tremendo problema... en el fondo la clase media en Chile esta constantemente colgando de un hilo y eso es uno de los problemas reales que veo, y que son consecuencia directa del modelo económico.
El abuso generado por el modelo económico de este país es tremendo y tan fuerte que te puede dejar en la calle o dejar, literalmente, morir si no tienes como pagar.
El modelo de libre mercado es una idea bonita si funciona bien, la ley de oferta y demanda es genial teóricamente, sin embargo, cuando las malas practicas como el monopolio, la colusión y los castigos irrisorios se naturalizan en Chile, las industrias hacen lo que quieren... ahí está el problema del modelo, la poca fiscalización y la falta de castigos para quienes comenten un delito. Incluso los llamados a fiscalizar, esos que se eligen por la ciudadanía y debieran representar el querer del pueblo, esos mismos, la clase política, tienen las mismas practicas corruptas e individualista...
Nuestra constitución política, heredada del 80, tiene muchas cosas que facilitan el abuso de las empresas y limita la participación del estado cosas mal llamadas negocios... como son los derechos fundamentales a la salud, educación, vivienda, pensiones... etc.
Ojalá Chile con todos estos movimientos abra los ojos y despierte hacia un camino de votar informado, cuidad la democracia y exigir justicia para todos y cada uno de los que nacimos en esta hermosa tierra.
Cuando era niño, recuerdo que en mi casa no se hablaba de la actualidad del país, o quizás a mi no me importaban esos temas y por eso no lo recuerdo, las onces tipicamente eran viendo la novela de moda, tipo sucupira, amores de mercado, etc... y no recuerdo ver las noticias, seguramente mis amados padres pensaban que eran temas que a los niños de los años 80 no les deberían interesar, sobretodo por lo convulsionado del país de aquella época.
Hoy, viendo al Chile actual, agradezco no haber sufrido esa angustia de ver como pasan estas cosas en las calles de mi querido país, y me siento extraño por no estar ahí, marchando, gritando, alegando por los derechos de las personas y parar los abusos. Tengo en casa un bebe que me detiene con la mirada, tengo que ser responsable de ir al trabajo al otro día, de evitar meterme en problemas y limitarme a apoyar desde mi casa y mis pensamientos... con un par de comentarios por redes sociales increpando a políticos y personas que yo considero responsable de lo que pasa.
Los abusos se han incrementados últimamente y todos lo hemos notado, basta con ver cosas como los planes de salud, los combustibles, los servicios como agua, luz, Internet, los pasajes de micro, la bolsa de supermercado, la carne, el pollo, el confort, medicamentos, etc, etc... Los que no nacimos en cuna de oro las tenemos que rasgar y gracias a la ayuda de los padres y con los créditos universitarios (que te dejan endeudado por alrededor de 20 años) logramos avanzar hacia una tranquilidad ficticia, que se traduce en necesidades básicas relativamente cubiertas y algunas comodidades como 1 auto, celular y poder ir a un restaurante de vez en cuando.
Objetivamente pertenezco, junto a mi familia, a un grupo de personas minoritario, la gran mayoría de los chilenos tienen ingresos inferiores a $500.000, pero los que estamos en esta situación también coincidimos que no somos estables, tenemos nuestros cimientos afirmados en palos de fósforos, si un miembro de la familia se enferma el gasto que hay que hacer es tan grande que no se puede soportar sin recurrir a gastar el patrimonio que hemos capitalizado y eso es un tremendo problema... en el fondo la clase media en Chile esta constantemente colgando de un hilo y eso es uno de los problemas reales que veo, y que son consecuencia directa del modelo económico.
El abuso generado por el modelo económico de este país es tremendo y tan fuerte que te puede dejar en la calle o dejar, literalmente, morir si no tienes como pagar.
El modelo de libre mercado es una idea bonita si funciona bien, la ley de oferta y demanda es genial teóricamente, sin embargo, cuando las malas practicas como el monopolio, la colusión y los castigos irrisorios se naturalizan en Chile, las industrias hacen lo que quieren... ahí está el problema del modelo, la poca fiscalización y la falta de castigos para quienes comenten un delito. Incluso los llamados a fiscalizar, esos que se eligen por la ciudadanía y debieran representar el querer del pueblo, esos mismos, la clase política, tienen las mismas practicas corruptas e individualista...
Nuestra constitución política, heredada del 80, tiene muchas cosas que facilitan el abuso de las empresas y limita la participación del estado cosas mal llamadas negocios... como son los derechos fundamentales a la salud, educación, vivienda, pensiones... etc.
Ojalá Chile con todos estos movimientos abra los ojos y despierte hacia un camino de votar informado, cuidad la democracia y exigir justicia para todos y cada uno de los que nacimos en esta hermosa tierra.
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